Puede que hayas oído hablar del cabello de nadador, cabello débil, seco e incluso verde luego de un día de piscina o de playa. Hay un mito común que dice que esto es el resultado de la sobre exposición al cloro del agua, pero la realidad es un poco más (químicamente) complicada. Antes de irnos de lleno en esto, vayamos a la raíz del problema del cabello de nadador – la salud de tu cabello.
cabello de nadador = cabello dañado
Tus fibras capilares están hechas mayoritariamente de proteínas, las cuales están organizadas en dos capas. La primera es la capa de la cutícula, hecha de “escamas” superpuestas. El cabello sano tiene una cutícula suave e intacta que está cubierta de una barrera protectora de lípidos y ayuda a proteger la capa interna del cabello – la corteza. El cabello sano con una cutícula y corteza intacta se siente suave, fuerte, se enreda menos y es mucho más fácil de peinar o estilizar.
Pero seamos realistas – todos tenemos cierto nivel de daño en nuestro cabello. Los diferentes tipos de daño pueden provenir de diferentes áreas de tu rutina. Puedes tener daño mecánico por cepillarte o secarte con una toalla, daño de calor, daño químico por servicios de salón y daño ambiental por solo existir con cabello.
El cabello dañado conlleva un impacto a su estructura general. Las escamas de la cutícula se separan y se vuelven más porosas por lo que el agua puede entrar fácilmente a tu cabello. Lo que está en el agua (y que está entrando a tu cabello) puede causar algunas extremas y no deseadas reacciones durante tu hora en el salón, degradando la corteza y resultando finalmente en el rompimiento de tu cabello.
el tema con las aguas duras
El agua dura tiene altas concentraciones de minerales y metales disueltos, específicamente calcio y magnesio. Pero hay otros tipos de metales presentes incluso en el agua suave, por lo que es muy probable que tengas algún nivel de acumulación de minerales y/o metales en tu cabello. Con el cabello sano, esto es menos preocupante porque su estructura está sana y existen menos lugares en los cuales estos metales pueden adherirse.
Pero ya que muchas personas tienen el cabello dañado y poroso, las fibras capilares absorben agua más fácilmente (y con ello más minerales y metales) Con el tiempo, esto se acumula en tu cutícula y corteza (la capa intermedia de tu cabello) causando reacciones química no deseadas que llevan a la decoloración o incluso la desintegración del cabello. Uff.
el real culpable
Entonces, ¿qué tiene que ver todo esto con el cabello de nadador? Bueno, como dijimos al comienzo, no es el cloro el que cambia el color, sino la presencia de cobre. Sip, el cobre es el culpable.
Los iones de cobre pueden encontrarse en el agua provenientes de algicidas que lo contienen (es un aditivo popular para controlar el crecimiento de algas en las piscinas) puede provenir también de las cañerías metálicas o incluso de el agua que fue utilizada para llenar esa misma piscina. Algunas formas de cobre tienen un color verde-azul brillante,
el cual combinado con los tonos amarillos de un cabello decolorado o rubio, hacen que su apariencia cambie y aparece el no deseado color verde.
Pero, ¿por qué el cobre presente en el agua de la llave no deja tu cabello verde? Al contrario de lo que la gente cree, el cabello de nadador es el resultado de la exposición de tu cabello a la combinación de cloro y cobre del agua. El cloro actúa como un fuerte oxidante, lo cual aumenta la absorción de cobre en tu cabello. Mientras más cobre, más verde el cabello.
Profundicemos aún más.
El cloro del desinfectante de piscinas actúa como un fuerte oxidante al igual que el decolorante, degradando el color de tu cabello y llevando a cabo el mismo daño estructural que una decoloración que obtendrías en un salón. Incluso en bajas concentraciones, el cloro en el cabello resulta en oxidación y rompimiento de cadenas polipeptídicas! Nadar a la intemperie puede empeorar este daño, ya que el cloro en conjunto con la radiación UV del sol causa más daño a tu color y proteínas capilares.
A fin de cuentas, esto es un círculo vicioso de metales dañando el cabello, creando nuevos espacios para que otros metales como el cobre se unan a las proteínas del cabello causando más daño. Finalmente, esto impacta la elasticidad de tu cabello, dejándolo más plano y propenso a romperse.
cómo arreglar el cabello de nadador
Mantén tu cabello sano concentrándote en la reparación del daño con cuidado capilar holístico. Al mantener la estructura proteica del cabello intacta, prevendrán la adherencia de metales dañinos que llevan el caos a la estructura capilar.
Si el daño ya está hecho, pide ayuda a tu estilista. Puede que te recomienden un champú detox (el nuestro remueve el 76% del cobre) para eliminar la acumulación de metales y
minerales. Si quieres llevarlo al siguiente nivel, puedes pedir un tratamiento desmineralizante. Esto rompe los enlaces formados entre los metales/minerales y tu cabello para eliminar las acumulaciones y resolver el cabello de nadador desde la raíz.
Que bueno saber todo esto, ¿no?
